La Biblia misma enseña que la Palabra de Dios es vital para todo creyente. Es por medio de ella que conocemos a Dios; conocemos Su carácter, Su voluntad y Su evangelio. La Palabra de Dios es completa en la revelación de su voluntad para salvación y suficiente para todo lo que Dios nos requiera creer y hacer. Con la ayuda del Espíritu Santo, al escuchar, creer y practicar la Palabra seremos equipados para cada día ser más como nuestro Señor Jesucristo y para ser testigos del evangelio en este mundo. Con esto en mente, te invitamos a que te unas a nuestro plan anual “La Biblia en un año”. Te sugerimos comenzar y terminar con un tiempo de oración, y al finalizar, tomar un tiempo para meditar en lo leído.
Toda Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender, para corregir, para instruir en justicia, a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, equipado para toda buena obra. (1ª Timoteo 2:16-17 NBLA)
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